Ingredientes para los canelones:
1 paquete de placas de canelones
6 o 7 barritas de surimi de cangrejo
1 lata hermosita de bonito en aceite
1 o 2 botes de espárragos finitos y pequeños
Ingredientes para la mahonesa de leche y Aove
1/2 vaso de leche
Sal
1 vaso de Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE)
1 diente de ajo
1 chorrito de vinagre de vino blanco o zumo de limón
Para decorar: Eneldo seco
Comenzamos por poner a remojo en agua caliente las placas de canelones, ya que en este caso elegí este tipo de pasta que no hace falta hervir.
Mientras se hidrata la pasta, troceamos los palitos de surimi en un bol y lo mezclamos con el bonito que habremos escurrido de su aceite previamente y desmenuzado. Reservamos.
Para hacer la mahonesa de leche, pondremos en un recipiente alto y estrecho (normalmente suele venir de complemento con la batidora) el medio vaso de leche y una pizca de sal, metemos la batidora y la ponemos en marcha muy suave y sin levantar del fondo. Vamos poco a poco incluyendo el aceite seguimos sin levantar, incluimos el chorrito de vinagre (si no tenéis a mano podéis utilizar zumo de limón recién exprimido) seguimos con el aceite y poco a poco ira cuajando, cuando mas o menos este ya podemos levantar poco a poco la batidora mientras va cogiendo la consistencia necesaria. Por ultimo añadimos el diente de ajo picadito y terminamos de batir para incorporarlo.
Ahora incluimos un par de cucharadas de esta mahonesa a la farsa que hemos hecho para rellenar los canelones.
Sacamos la pasta de canelones y colocamos en cada uno un esparrago, si son muy gorditos los podemos partir por la mitad. Incluimos un poco de farsa a lo largo y cerramos con cuidado.
En una bandeja ponemos en el fondo una cucharadas de la mahonesa que hicimos y vamos colocando los canelones. Por ultimo los decoramos con otro poquito de mahonesa y espolvoreamos eneldo seco por encima.
En la mahonesa de leche y AOVE, he utilizado un aceite 100% Picual de Jaén, quizás de sabor sea mas fuerte, así que lo podéis hacer a vuestro gusto o incluso hacerla con aceite de girasol.
Lo bueno de esta mahonesa también es que no hay problema de salmonelosis al no llevar huevo y te dura muy bien en la nevera unos días.
También tenéis que tener en cuenta el tamaño del vaso que utilizareis para la medida de la leche y el aceite, ya que cuanto mayor sea, mas cantidad hacéis. Os recomiendo que no sea muy grande. Con esta cantidad queda una textura cremosita como quizás podéis apreciar en las fotos, que es como a nosotros nos gusta, pero si queréis algo mas consistente entonces la proporción seria de 1/3 de leche por 1 de aceite.