Si algo no puede faltar en una buena mesa, da igual la época del año, es una deliciosa ensalada, solo por su versatilidad ya se merece un sitio de honor, además puede ser plato único, acompañamiento, picoteo, valen para todo y son la mar de creativas.
Ingredientes:
Canónigos
Rucula
Nueces de macadamia
Avellanas
Salmón ahumado en lonchas
Aceite de oliva virgen extra (variedad koroneiki) de Artajo
Vinagre de sidra
Sal
Lavamos los canónigos y la rucula y los disponemos en una fuente.
Añadimos un buen chorro de aceite y un poco de vinagre.
Repartimos los frutos secos por toda la ensalada y hacemos pequeños enrollados con trozos de salmón ahumado.
Terminamos con un poco de sal.
No pongo cantidades ya que depende un poco los comensales que seáis o si lo hacéis como plato principal o acompañamiento. Seguro que tenéis buen ojo y lo hacéis con la cantidad que mas os guste.
He utilizado la variedad koroneiki (de origen griego) de aceite ya que este es algo mas suave y tiene un toque a avellana en boca que va genial con la combinación de esta ensalada. Os animo a que descubráis los diferentes tipos de Aove que tienen en Artajo.